Alma y Habiba están juntas. Una llamada y no me lo podía creer. Cinco minutos más y la llama de la alegría pendía en mí. Diez minutos después euforia pura al pensar que lo habíamos conseguido, que en el fondo las instituciones, los poderes, no podían estar tan ciegos a la voluntad del pueblo...
Y veinte minutos para leer las declaraciones realizadas por los portavoces del IMMF y darme cuenta de que la buena noticia estaba ahí, pero no era tan buena como cabía esperar... No era un juez el que había hecho "entrar en cintura" a los engreídos técnicos y funcionarios del IMMF. No era una asunción de los errores, nadie entonaba un mea culpa ni asumía responsabilidades... Más bien al contrario:
"ha acreditado mediante un escrito presentado al IMMF que cuenta con una oferta de trabajo y dispone de un lugar de residencia en un piso para mujeres e hijos en situación de máxima vulnerabilidad lo que garantiza el bienestar de la menor".Esta es la razón por la que en el IMMF devuelven a Habiba a su hija. Porque tiene casa y trabajo, pero ¿No se supone que esa es la labor en la que la tenían que haber asistido y ayudado en el centro de acogida en lugar de preocuparse por si su hija lactaba o dormía con ella? ¿Es que la Fundación Raíces es más eficaz en estos menesteres que una institución privada financiada con dinero público?
Pero no queda ahí la cosa. Todavía ellos, los señores y señoras del IMMF, tienen que quedar bien y hacernos "comulgar con ruedas de molino" afirmando que
También han valorado que en estas tres semanas la actitud de la madre "ha evolucionado favorablemente en coordinación con los servicios sociales".¿Cuál ha sido su evolución? ¿La sumisión a la realidad de que, habiéndola separado de su hija, ya no la podían hacer más daño? ¿La increíble red de apoyos y solidaridad que se ha tejido a su alrededor? Y, lo que es peor, ¿Cuál ha sido la labor de los servicios sociales en todo esto? ¿Habéis oído hablar en estas tres semanas de algún trabajador social a sueldo de la Comunidad de Madrid que haya ofrecido su apoyo y ayuda a Habiba?
De la misma manera, "y siempre velando por el interés de la menor", la madre ha aceptado el apoyo y seguimiento de los servicios sociales de la Comunidad y del Ayuntamiento de Madrid así como iniciar una terapia psicológica tal y como se le ofreció en la residencia de madres e hijos de la Comunidad de Madrid en la que estuvo alojada dos meses y medio.Claro que sí. Y digo yo ¿Qué madre a la que hayan quitado la tutela de su hija no iba a aceptar iniciar una terapia psicológica a cambio de recuperar a su criatura? Desde luego, Habiba habrá aceptado cualquier cosa con tal de volver a abrazar a su hija, incluso una "terapia psicológica" que ellos puedan usar como arma para esgrimir en su contra, para seguir sembrando dudas sobre su estabilidad psicológica, que ha estado certificada sobradamente durante todo este tiempo por más de un especialista. Solo espero que esta terapia no se centre en intentar erradicar conceptos como la lactancia y el colecho de su vocabulario de crianza y sí que vaya más encaminada a ofrecerle herramientas y apoyos para superar el tremendo trauma que han pasado madre e hija durante estas tres interminables semanas y media.
Hoy estoy alegre. Hoy es un gran día. Pero a la vez siento una rabia tremenda. Una rabia incontrolable contra las personas que cometen errores y no saben rectificar y pedir perdón, contra las personas e instituciones que se creen por encima del bien y del mal, por el sufrimiento gratuito que se imprime tan a la ligera a los seres más desvalidos.
Alma y Habiba. Disfrutad de esta noche. De todas las noches. Que todas las noches sean noches de boda, que todas las lunas, sean lunas de miel. Que todas las noches a partir de ahora rememoréis este grandioso reencuentro y que nunca olvidéis la tremenda alegría y satisfacción de este abrazo interminable.
Señores del IMMF y demás personajillos que todavía creen en la impunidad. ¡¡¡Temblad!!! Somos mujeres, somos fuertes, somos ciudadanas, somos madres. Hoy Habiba tiene miles de hermanas y Alma tiene miles de madres. Tenemos "maternidad" de sobra para abrazar a todos los niños desamparados que todavía hoy sueñan pesadillas a pesar de tener los ojos abiertos.
¡¡¡Temblad!!! Hoy festejamos. Mañana... Mañana seguiremos luchando.
Me ha encantado Eloísa.
ResponderEliminarY si, que tiemblen... porque no nos vamos a olvidar de esto.
Precioso Eloísa.
ResponderEliminarGracias a las que habéis luchado por esta causa.
Desde que me he enterado de la noticia que me estoy planteando que se han salido con la suya y que han hecho pasar por el aro a Habiba.....Y, ahora que tiene trabajo, con quién dejará a su hija????? y su lactancia, que va a pasar con ella????
ResponderEliminarLo primero, compartir la gran alegría y emoción que me embarga desde que conozco la noticia. Les deseo todo lo mejor a las dos. En cuanto al IMMF, es cierto todo lo que dices, aunque a mí no me ha sorprendido, por desgracia, las cosas funcionan así; pero aunque no hayan reconocido su error y su ineptitud, se han visto obligados a revocar su decisión. Me quedo con eso y conque gracias a personas tan maravillosas cómo tú, hoy festejamos, mañana... seguiremos luchando.
ResponderEliminarUna reflexión muy acertada. Este ha sido solamente un granito de arena para todas las madres pero lo más grande para esa madre y esa niña. Y ya sabemos que hay personas que no saben reconocer sus errores. Como dices, seguiremos al pie del cañón
ResponderEliminarEsto es justo lo que me habría gustado escribir a mi :)))))
ResponderEliminarGracias Eloísa :)
Me da la sensación que dicen "yo no me he equivocado en nada, lo hicimos bien" ni disculpas, ni fue un error, qué van a decir? seguimos todas las madres expuestas en mayor o menor medida a que nos puedan quitar a nuestros hijos porque practicamos una crianza respetuosa/natural o como le queramos llamar.
ResponderEliminarMuy bien escrito eloisa
Has escrito exactamente lo que rondaba por las cabezas de todas. ¡Gracias! Ya no hace falta que escriba en mi blog ;-)
ResponderEliminarEs en cierto modo "previsible": son personas con egos y vanidades muy grandes, que no van a dar su brazo a torcer, a menos que un juez los obligue. Pero ya sabemos también que hasta de la Justicia podemos dudar.
De todos modos, yo estoy segura de que ya no se meterán más con Habiba y mucho menos con la lactancia.
Aunque ahora intenten salvar su culo como puedan, habrán aprendido la lección.
La fuerza maternal, el amor primario, el paradigma del cuidado (esté donde esté, en hombres o en mujeres que no sean madres) es lo que va a cambiar el mundo. Es la cara hermosa de la globalización.
Esto ya no lo para nadie!
Un abrazo, Eloísa, y muchísimas gracias por todo lo que has currado y dado en este caso.
Te admiro un montón!
Eloisa, qué bonito... Voy a compartirlo en mi blog. Gracias por estas palabras tan lindas, y por abrirnos los ojos a todas, porque la lucha continúa...
ResponderEliminarBesos!
Que tiemblen, que tiemblen.... que tiemblen todos estos que ocupan su cargo, no precisamente por su capacidad de servicio y la utilidad de sus facultades en beneficio de los demás, sino por, como tu bien dices, su enorme ego y vanidad, que les ha llevado a pisar al que sea y luchar como sea por un puesto desde el cual no tienen la mínima intención de servir a nadie, sino que sólo pretenden servirse de la autoridad que les confiere.
ResponderEliminarQue tiemblen porque la época de las madres solas, incultas, sometidas y encerradas en casa ya ha pasado........... ha llegado el tiempo de la maternidad impúdica, libre, inteligente, amorosa, nutritiva, formada, bien informada, concienciada, global e independiente.......
Que tiemblen, aunque, si vieran un poco más allá de su rojiza nariz, verían que no hay razones para temblar, porque esto que está pasando es lo mejor para todos; incluso para ellos.
Reconocer errores en uno mismo es de sabios... y han demostrado en demasía que son necios de la peor calaña.
ResponderEliminarPero somos muchas, en muchos países, llegamos a dónde jamás pensaron que ibamos a llegar. Entre todas seguiremos luchando por cada injusticia que ellos cometan.
Excelentísimo post! Ya lo compartí en nuestra página de Facebook.
Abrazos para todas!
Julie.
Gracias Eloísa, por poner palabras a mis pensamientos y a lo que siento. Efectivamente hoy festejamos, pero mañana ya no es fiesta.
ResponderEliminarCreo que no deberíamos ni advertirles, ellos ya están temblando en sus sillas y no comprenden muy bien, estoy segura. ¿De qué extraño lugar brota esa fuerza nuestra? ¿de dónde le salieron tantas hermanas a Habiba? ... tardarán en comprenderlo, pero nosotras no pararemos hasta que lo hagan.
Ha sido grato caminar y verte al lado y saber que tú también velabas cuando yo lo hacía; y que tantas y tantas personas de bien, madres y padres poderosos alentados por el sueño tranquilo de nuestros hijos han tragado lágrimas tan amargas como las nuestras... y que finalmente estamos todos hoy festejando.
Lo celebraremos por todo lo alto pronto, muy pronto.
Sobre las excusas, motivaciones, etc para restituir los derechos de Alma y Habiba... tu y yo sabemos que esto no es más que palabrería y que todavía están intentando tragarse un sapo bien gordo.
Festejemos! Enhorabuena! Salud y mucha teta!
Patricia
Lo has dicho todo. Precioso
ResponderEliminarMaría dijo: "Que tiemblen, aunque, si vieran un poco más allá de su rojiza nariz, verían que no hay razones para temblar, porque esto que está pasando es lo mejor para todos; incluso para ellos."
ResponderEliminarExactamente, cambiando el paradigma de la dominación por el paradigma del cuidado se pasa de una estrategia de gana-pierde a una estrategia de gana-gana.
¡Todos ganamos!
Un abrazo a toda la tribu!!!
Ojalá sí, ojalá saquemos de esta injusticia la inercia para seguir luchando.
ResponderEliminarHay demasiada gentuza caminando sobre nuestras cabezas sin que nadie les haya dado permiso!
Me ha gustado mucho, Eloísa, ¡¡vaya si tenemos maternidad de sobra!! porque los niños son hijos de todos.
ResponderEliminarLadyA, los trabajos que tiene Habiba son compatibles con tener a su hija con ella y darle de mamar, como dar clases de árabe o, como en mi caso, venir ella y su hija a jugar con la mía unas horas.
Sí, a todas nos habría gustado que reconocieran abiertamente su error, pero era muy improbable que eso sucediera. Lo importante es que han rectificado y que Alma y Habiba vuelven a estar juntas.
ResponderEliminarMe alegra tanto. Gracias por tus palabras. Son las palabras de tant@s.
ResponderEliminarGracias Eloisa, por tus palabras y por tu lucha, gracias por abrirnos los ojos. Un besazo
ResponderEliminar