¿Por qué si entre el 10% y el 20% de los embarazos no llegan a término el término muerte gestacional y perinatal es tan desconocido en nuestra sociedad?
¿Por qué solo cuando te enfrentas al dolor de esta experiencia es el único momento en que otras mujeres se "atreven" a contarte que ellas han pasado por lo mismo?
¿Por qué los profesionales sanitarios están tan "desensibilizados" con este tema si cabe esperar que conforme un gran porcentaje de las consultas y las "urgencias" de ginecología?
¿Por qué la sociedad en general niega el dolor de las familias que pierden un ser querido solo porque ese ser humano no había salido todavía del útero de su madre?
¿Por qué se pide a la madre que en pleno puerperio sin bebé se reincorpore a su vida previa como si no hubiera pasado nada?
¿Por qué la gente se empeña en decirle a esa madre que "piense en sus niños" como si el hecho de tener otros niños minimizara el alcance de la pérdida de un bebé que se ha gestado y sentido en el útero igual que los anteriores?
¿Por qué si la estadística dice que entre el 10% y el 20% de los embarazos no llegan a término yo ya voy por el 50%? ¿Quién se ha llevado el embarazo normal al que estadísticamente tengo derecho? ¿Quién me ha robado el mes de abril?
Si alguien tiene alguna respuesta, se agradecerán aclaraciones. En las noches de insomnio de las que "disfruto" últimamente, estos interrogantes no hacen más que darme vueltas a la cabeza una y otra vez.
Yo también pensé duranta muchos años de mi vida que la muerte no existía y me enfrenté a ella cara a cara y por primera vez enterrando un hijo.
ResponderEliminarA partir de ese momento yo sólo quería hablar de mi hijo, del parto, de su vida (corta cierto pero toda su vida) y me encontré con que ni siquiera muchas mujeres que habían pasado por una situación parecida quisieron acompañarme en mi dolor.
Y decidí cómo quería vivir ese puerperio y de la misma manera que no escuché años atrás las voces de los que me decían: deja al bebé en la cuna llorando, no le des tanto pecho, no le cojas que se acostumbra etc...ahora tampoco escuché a los que me aconsejaban: borrón y cuanta nueva, que había que seguir adelante, que tenía otros hijos, que no me viesen llorar (te puedo asegurar que no se han quedado traumatizados). Para mi fue especialmente dificil tener que estar todo el día con los niños, aunque no hacíamos homeschooling....pero eran mis circunstancias y con niños y todo viví mi duelo lo más intensamente posible.
Sin somníferos, sin tranquilizantes, leyendo, llorando y escribiendo...El blog que hice para mi hijo fue mi tabla de salvación.
Un abrazo fuerte, fuerte.....
Ah!! también me ayudó la fuerza de las amigas que no estaban físicamente junto a mi pero que estaban, vaya si estaban...
Hola Paloma:
EliminarYo me divido hablar de mi pequeña y lo que ha supuesto para mi y aferrarme a su recuerdo como algo íntimo y personal. La verdad es que todo el apoyo que estoy recibiendo me halaga y abruma a partes iguales, pero ayuda, siempre ayuda.
Desde luego, yo no quiero anestesiarme de este dolor. Tiene que pasar. Tenemos que sufrirlo y darle la bienvenida, vivirlo y procesarlo para poder seguir adelante.
Un abrazo fuerte.
A veces esta sociedad tacha determinados temas como tabús... no se si por comodidad, por incomodidad, o porque antiguamente las cosas eran así y no conseguimos quitarnos esas malas costumbres de encima.
ResponderEliminarMenos mal que cada vez sois mas las madres que ponéis voz y cara a un sentimiento, ayudando así a las que vengan después de vosotras.
Es una mierda que tengáis que enfrentaros casi solas a esto... que tengáis tantas preguntas sin respuesta, o tantas respuestas que no os gustan... pero sabed que no estáis solas, y que, aunque muchas no hayamos pasado (por suerte) por algo así, somos madres y entendemos, comprendemos y compartimos vuestro dolor.
Un abrazo fuerte fuerte Elo. Ánimo y vive ese puerperio como tengas que vivirlo, como sientas que debes, y quieres hacerlo.
Muchas gracias por tu aportación, Verosa. La verdad es que las reflexiones que aportáis son más que interesantes para mirar todo el asunto desde otra perspectiva. Cierto es que toda la muerte es tabú y más todavía cuando lo muerto ni siquiera se vió... Por eso creo que se da ese ánimo a hacer borrón y cuenta nueva.
EliminarUn abrazo.
Creo que es una señal más de este mundo deshumanizado y desensibilizado en el que vivimos, unido a una sociedad que valora muy negativamente el fracaso. Se supone que las mujeres tenemos que dejar de ser personas para ser SUPERMUJERES: a tope en el trabajo, a tope en la casa, a tope con nuestra pareja, a tope en la vida social.... es decir productivas y exitosas al 100%.
ResponderEliminarUna gestación que no llega a término no deja de ser un fracaso, y como tal es una "vergüenza", en esta sociedad podrida en la que las mujeres sólo nos podemos embarazar cuando conviene (cuando ya tenemos la carrera asentada, un trabajo estupendo, un chaletito bien puesto y el monovolumen familiar), pero que cuando llega el momento hay que hacerlo sin problemas (si no, ya se encargarán de venderte tratamientos, tests de ovulación y todo lo que haga falta)... y al más mínimo problema: sssshhhh, silencio, no lo digas que es una derrota, porque tú querías algo que no has conseguido, mejor disimula y dí que no querías.
Y somos las mismas mujeres "fracasadas" las que no queremos dar la cara y decir "Sí, qué pasa, tengo sentimientos, sufro, me duele mi niño".
Yo no lo viví en persona, pero sí sufrí con el dolor de mi hermana, con varios embarazos que no llegaban a término, con abortos que eran auténticos partos. Y con silencio, mucho silencio porque la triunfadora de mi hermana prefería que nadie se enterase, y porque tiene un niño que quería preservar del dolor, en lugar de enseñarle que existe, y que es algo que todos pasamos en un momento u otro.... a mí no me parecía bien, pero respeto lo que cada uno quiera hacer con sus duelos.
Por eso me quito el sombrero contigo, Eloísa. Sigo tu blog hace tiempo (desde el embarazo, cuando me puse como loca a buscar pañales de tela), me gusta, y tus últimos posts están llenos de amor y de valentía. Eres admirable: tú sí que eres una SUPERMUJER (con mayúsculas), un ejemplo a seguir, y no todas esas petardas que nos quieren colar por "mujeres bandera".
Hola Carolina:
EliminarMe gusta tu aportación. Me ha hecho reflexionar, sobre todo lo que dices del fracaso y la verguenza... ¿Quizás eso contribuya a que otras madres no quieran hablar contigo de eso? Tengo amigas que saben que sufrí un aborto en mayo del año pasado y ni siquiera me lo han mencionado una sola vez desde entonces ¿Por qué? ¿Por que es tabú? ¿Por no mencionar mi fracaso? ¿Por no lidiar con el dolor?
Muchas gracias por tus halagos y por decirme que soy una Supermujer. Por mucho que use a Wonderwoman como avatar, no aspiro a ser una supermujer, sino que el mensaje es que todas las madres somos superheroínas para nuestros hijos... Yo a Darío muchas veces le digo que tengo "superpoderes de madre" cuando sé que está haciendo algo que no debería sin verlo. Pero no aspiro a ser un ejemplo o un ídolo para los demás ni mucho menos, solo quiero vivir mi vida de la manera que mejor me parece posible...
Y en este caso, ni puedo ni quiero acallar mi dolor. Porque está ahí, porque silenciarlo no me aporta nada ni a mi ni a mi familia y porque creo que compartirlo aquí puede ayudar a otras madres en mi situación al igual que a mi antes me ayudaron los testimonios de otras mujeres que habían pasado por lo mismo.
En cuanto a la situación de tu hermana... ¡¡Cuánto dolor se transluce en tus palabras!! La maternidad muchas veces nos separa de la familia más que juntarnos al tener visiones completamente diferentes. Tu hermana tuvo su dolor, su duelo, y trató de gestionarlo lo mejor posible. Yo siempre digo que si esto mismo me hubiera pasado hace 5 años, otro gallo me hubiera cantado, probablemente. No soy la misma mujer ahora que hace tan solo 5 años. Dale un abrazo fuerte a tu hermana, porque todos esos miedos y ese temor al rechazo no son más que síntomas de su gran necesidad de cariño y comprensión.
Un abrazote grande para las dos y vuestros peques.
Por cierto, Verosa, creo que antiguamente las cosas no eran así, o no por lo menos en las sociedades rurales. Mi padre perdió un hermanito que no contaba ni con 6 meses de vida, y nunca lo ha olvidado. Lo ha superado, como otras cosas tristes que le ha tocado vivir, no tiene un trauma con ello, pero lo recuerda con dolor (y eso que es hombre y se supone que ellos sí que no pueden permitirse esas "sensiblerías").
ResponderEliminarCarolina, creo que me has malinterpretado... cuando decía que antiguamente las cosas eran así, me refería a que eran un tabú, y no se permitía que se hablase de ello (estaba hablando de tabúes), como por ejemplo otros temas tabú han sido tener cáncer, adoptar a un hijo, o miles de cosas mas... no me refería al dolor de una madre o un padre ante la pérdida de un hijo, que, por supuesto, es el mismo ahora, que hace 100 años.
EliminarUn beso.
Eloisa, la gente no quiere vivir el dolor o enfrentarse con la muerte, si tú pero no pasa página ellos tampoco pueden hacerlo porque les pondrás en las narices esa realidad incómoda. Pero no son ellos los que han perdido un hijo, así que no son ellos los que marcan el ritmo. No se puede pasar página de algo así, eso estará siempre presente, quizá más adelante como una nota al márgen, pero presente. En cuanto a los profesionales qué decirte. Hay una frase de la genetista que se me quedó grabada cuando la enfermedad de mi hija aún era sólo un riesgo y no una realidad. Al comentar yo que conocía la enfermedad por mis estudios me preguntó qué era, le respondí que era psicóloga y su cara fue un poema. me soltó: y para qué estudiáis vosotros eso sí estos niños no tienen tratamiento. Se había olvidado totalmente de los padres, de que alguien tiene que informarlos, de que tienen que procesar un duelo... Se centran en el útero y se olvidan del cerbro.
ResponderEliminarYo sigo preguntándome por qué a mi, si está enfermedad se da en uno de cada 3000, por qué soy ese UNO. Sé que no obtendré respuesta, sólo quiero que se quede en uno de 3000 y mi porcentaje de 100% de embarazos perdidos disminuya.
Un besazo y mucho ánimo.
Hola Porelcaminodificil,
EliminarLa verdad es que lo de muchos profesionales sanitarios es de órdago. Bufff... La atención ginecológica, en general, deja muy poco espacio a la empatía y más bien peca de añiñamiento y maltrato a la mujer. Cuando tienes a tu bebé después de todo eso, es fácil olvidar. Cuando sufres esa retahíla y encima en el momento de una gran pérdida, son como alfileres que se te clavan debajo de las uñas y no puedes dejar de pensar en ello y darle vueltas.
En cuanto a tu 100%... Sí, la estadística y las matemáticas son así de puñeteras. Yo me quejo de mi 50% y no me consuela que haya otras mujeres/familias que estén peor... Pero te deseo todo lo mejor en esta aventura de la maternidad y que tu estadística mejore y tengas pronto a tu deseado bebito en tus brazos.
Un abrazote.
Hola Elo, solo enviarte un abrazo en un momento tan duro y preguntarte un detalle: ¿has mirado qué nivel tienes de vitamina D? Hay una relación entre el déficit de vitamina D y las pérdidas repetitivas.
ResponderEliminarTodos los bebés son seres vivos desde el momento que la vida se inicia. Cuando cuesta mantenerla nos damos cuenta de lo difícil que es este milagro de la naturaleza. No necesitamos estas pérdidas para darnos cuenta, claro, pero como cuando por un accidente o una enfermedad perdemos nuestra "vida habitual", es entonces que valoramos lo que teníamos.
Aunque sean muy duros, vivelos a tope para no olvidarlos nunca y valorar los amaneceres que vendrán.
Un abrazo
Hola Rosa:
EliminarMuchas gracias por tus ánimos y por acordarte de mí en estos momentos. La verdad es que no me he analizado la vitamina D recientemente. En este caso mi pérdida fue por un síndrome de Turner que es el origen de las malformaciones que tenía Mi Pequeña Flor, aunque no sé si eso puede estar relacionado o no con la vitamina D... Yo ahora ando convencida de que es una conspiración cósmica para fastidiarme la vida (es broma), pero nunca está de más plantearse este tipo de cuestiones, así que muchas gracias por la pista.
Desde luego, perder algo te hace valorar lo que tienes... Pero no por eso dejas de añorar lo que has perdido. A mi después de dos hijos sanos y dos abortos consecutivos me surgen muchos interrogantes filosóficos... Y aunque mi deseo maternal esté ahí y tenga tres hijos de los que solo dos están vivos, no puedo dejar de alegrarme con mis pequeños, con sus ocurrencias y con las pequeñas cosas de la vida.
No me arrepiento de haber vivido mi embarazo "a tope", porque con Mi Pequeña Flor el "carpe diem" estaba cantado... Es una buena filosofía de vida.
Un abrazo.
Hola Eloísa, todas esas preguntas me las hice yo miles de veces... A mi, me tocó no el 50%, sino el 100%. Yo interrumpí mi embarazo de 20 semanas, y mi segundo embarazo acabó en aborto diferido a las 8 semanas. Me volví aún más loca si cabía, pero he de reconocer que esa segunda pérdida sólo hacía que yo llorase más por mi primera hija. Quise someterme a un DGP, menos mal que dí con unos cuantos médicos decentes...
ResponderEliminarEn fin, que dices verdades como templos, yo misma me decía que si hubiera tenido más hijos, no hubiese tenido tantas ganas de morir... Aunque en ningún caso creo q el hecho de tener más hijos haga que perder a uno de ellos duela menos.... Pero las frases de ese tipo, en mi caso el típico "ya tendrás más" era lo único que me sacaba de mi tristeza infinita para ponerme furibunda... Ni siquiera mi propia familia me entendía, fue muy muy duro... Hoy tengo una hija, la que me ha devuelto las ganas de vivir, y como dicen por ahí arriba, es algo q siempre estará presente en mi memoria, pero ya no duele igual, han pasado 4 años de aquello, tiempo, tiempo y tiempo es lo que más necesitas...
Un beso fuerte,
E
Hola E:
EliminarSí, tengo claro que el tiempo casi todo lo cura. En mi caso, la herida está todavía muy reciente. Me alegro de que tu hija haya sido un bálsamo para tu pérdida, aunque supongo que siempre estará presente.
En tu caso, la furia te sacaba de la tristeza. Y eso me parece tan bueno y tan esperanzador, las ganas de seguir luchando como una leona, porque perder el recuerdo de nuestros hijos pérdidos significaría perderlos del todo. Ahí tienes todos los instintos maternales saliendo a flote por tu bebé.
Un fuerte abrazo.
Simplemente rodeate de gente que te entienda y te apoye como tu necesitas, sea de la forma que sea... Yo tengo en mi entorno 1 viuda de 33 años, una amiga con abortos múltiples (siempre en las primeras semanas) y un caso similar al tuyo y nadie se avergüenza de nada, ni de llorar! Y las "afortunadas" las intentamos rodear como necesitan... Siempre con la mejor intencion, aunque no siempre aciertes!
ResponderEliminarY tus hijos simplemente te acompañarán en los días de lágrimas y en los de risas... Si lloras por alguien es porque mereció la pena...
Hola CCG:
EliminarMe ha encantado tu frase "si lloras por alguien es porque mereció la pena". Sí, ha merecido la pena, eso es cierto, pero precisamente por eso la pérdida es más dura.
La verdad es que me siento afortunada por el gran acompañamiento que tengo, y aún así hay muchas espinitas clavadas que me hacen sacar todos esos por qués.
Un gran abrazo
Porque a la sociedad actual, lo que nos venden, lo que nos vendemos (nosotros somos esta sociedad) es que:
ResponderEliminar- El dolor es feo, es malo. Y como es feo y malo, vamos a evitarlo y a taparlo: aspirina ante el más mínimo dolor de cabeza; el resfriado ya no se cura solo, no, mejor nos atiborramos a medicamentos; si andas j**dido por tu quimio, no lo demuestres, a nadie nos gusta saber que te duele.
- La enfermedad es fea, es mala. El cáncer es malo, no hay que hablar de ello; un aborto espontáneo es malo, te damos algo de margen para llorar, pero luego te pedimos que rías, como si no hubiera pasado nada, eh, guapa?
- La muerte es fea, es mala. Mejor que no exista. Maquillamos a los muertos, para que no parezcan que lo están; si vemos degollar a un pollo, lloramos o apartamos la cara con repugnancia, pero si nos lo dan matadito y despiezado, bien cocinado, nos encanta y nos lo comemos con placer; en las noticias, los muertos ya no son tales, son números, o mero morbo, porque son desconocidos, anónimos para nosotros, así impersonalizamos la muerte también.
Perdona si he sido algo dura, pero es que me parece que estamos llegando a tal extremo de hedonismo, que estamos perdiendo la humanidad. Y porque creo que esto que he dicho, explica la ausencia de datos que comentas, la ausencia de experiencias al respecto.
Besos
No me parece que hayas sido dura, Monstrua, sino todo lo contrario. Es eso que dices precisamente lo que me revoluciona y hace que me revele. El dolor está ahí y cumple su función, negarlo solo es perpetuarlo y enquistarlo.
EliminarCreo que deberíamos dejar de ver tantos "cuerpos" para pasar a ver "personas". Porque en el dolor puede haber belleza. Porque el dolor por mi pequeña solo demuestra lo grande que ha sido su pequeña huella en este mundo.
Un gran abrazo.
Te he dejado una cosita en mi blog, para que la recojas cuando quieras :)
ResponderEliminarQuerida Eloisa, sólo quería darte un enorme abrazo, arroparte y compartir tus lágrimas.
ResponderEliminarMe acuerdo mucho de tu pequeña Flor y de cómo ha tocado tantos y tantos corazones.
La maternidad es un camino de Amor, a veces dichoso y otras cargado de dolor, pero, siempre acaba perdurando el Amor y su recuerdo.
Un abrazo muy fuerte de corazón a corazón,
Elena
Elena:
EliminarTus palabras, tu calor y ese abrazo tan cercano me reconfortan y me siento muy, muy arropada. Al leerte y sentir ese amor, ese pétalo de mi pequeña Flor que ha anidado en ti, me siento orgullosa como madre por todo el camino que hemos recorrido juntas, las cuatro. Tú y tu pequeña, yo y la mía. Y la transformación que siempre lleva, porque cualquier hecho que aumente nuestra capacidad de amar siempre es bienvenido. Y en nuestro caso, la tristeza no es sino un síntoma de ese tremendo amor.
Siempre le agradeceré a mi pequeña haber iluminado estos últimos meses y, sobre todo, haberme conducido por un camino que ha cruzado mi sendero con el de tantas personas que me han iluminado, ayudado y arropado tanto.
Un abrazo muy fuerte de corazón a corazón para ti y tu familia, Elena.
Eloísa
Son preguntas que ninguna mujer debería hacerse, xq son preguntas muy duras.
ResponderEliminarPerdí a mi madre muy joven, y día a día la hecho en falta, y perdí a mis bebés en mi vientre y los añoro a cada instante.
¿Xq una pérdida se comprende y las otras dos se intentan minimizar? Como tu no tengo respuesta.
Lo que si tengo son dos brazos para abrazarte tan fuerte que tu pena salga x unos instantes de tu corazón, tengo oídos para escuchar como te sientes y sobretodo tengo todo mi cariño y tiempo para apoyarte a ti y a los tuyos.
Hola Leia:
EliminarYo encantada de tener esos brazos abrazadores, esos oídos y todo tu cariño y tu tiempo. La verdad es que es injusto que se intente minimizar la pérdida, aunque quizás la vía sería normalizarlo para que más madres estemos preparadas para afrontar este tipo de situaciones cuando nos suceden y que no nos cojan tan "desprevenidas".
Un gran abrazo para ti también y para esos bebitos que ya no están... ¡¡¡ Y para el que está también!!! :D
Querida Elo,
ResponderEliminaren el fondo no hay apoyo, ni comentario, ni frase, ni abrazo, ni regalo que vaya a devolverte a tu hija. Nada nos los trae de vuelta. Ese vacio del útero es profundo y sangra, porque allí está anidada nuestra alma de madres. Yo no he conseguido llenar el abismo en dos años, y no creo que se llene tampoco el día que vuelva a estar embarazada. Nada nos devuelve a los que se han ido, nada suple su presencia, nada puede recoger todo el amor que les teníamos reservado. La muerte de un bebé es injusta, desde nuestra visión de vida cultural. Si se muere el abuelo de 97, bueno, da penita, pero ya tiene el camino recorrido, pero para ésto, no hay explicación, no hay consuelo, y por eso cae el velo del silencio. Creo que como ya te han dicho el cambio pasa por nosotras, por traer esta realidad a la vida cotidiana, la gente se queda ojiplática cuando preguntan "eres mamá?" y digo, sí, de un bebé que en sólo 9 semanas me enseño la mejor lección de todas....a ser yo misma. Les incomoda mi respuesta, pero poco a poco he ido viendo que la gente respeta y se enternece con que no olvide a mi bebé, con que tenga nombre, y con que le cuente entre los mios como cuentan mis abuelos... Pequeña Flor es una de esas bellas almas mágicas (muchas muchas desde 2012) que este fin de etapa vinieron y cumplieron su cometido, enseñarnos a dejarles ir, recordarnos que no son nuestros...que la vida pasa, pasa por nosotras, pero no nos pertenece, que son libres desde que nos eligen como madres, y también cuando deciden que ya han acabado. Pequeña Elo, siente mi abrazo fuerte, y mis lágrimas por el dolor compartido y no te rindas, háblale desde tu niña herida, porque entre ellas se entienden mejor, y no olvides nunca que ella te eligió, de entre todas las madres del mundo, a tí, y sólo a tí, poderosa y frágil, dura y tierna, hija y Madre, niña sabia... a tí y a ninguna otra...
Hola preciosa:
EliminarSí que es cierto que este vacío nada lo alivia y la pérdida es igual de pérdida sin porqués y con ellos. Yo también he aprendido mucho con Mi Pequeña Flor y por eso estoy muy agradecida... Pero no dejo de pensar si en tan poco tiempo me han enseñado tanto, ¡¡Qué no hubiéramos logrado juntas de tener más tiempo!!
Gracias mil por esas hermosas palabras y un gran abrazo para ti también y para ese pequeño y hermoso hijo que tanto te enseñó.
Eloísa
Pues yo solo puedo decirte que cada uno vive el dolor a su manera. Yo sufrí dos abortos antes de tener a mi hijo, después de 4 años intentandolo, y no me apetecía hablarlo con nadie...era tan grande la pena y el dolor que nada me consolaba y los comentarios de la gente solo conseguían ponerme rabiosa, así que prefería no hablarlo. Quiero decir que no siempre es por tabúes, no querer reconocer el fracaso, etc que no se habla de este tema, sino por simple y llanamente por pena...un beso grande. D
ResponderEliminarHola:
EliminarEntiendo que no te apetezca hablar de ello. Quizás si la actitud hubiera sido diferente, no te hubiera dado tanta rabia y hubieras podido sacar hacia afuera parte de ese dolor y compartirlo. En mi caso, ver cómo otras muchas personas amaban a mi hija igual que yo a pesar de ser un ente etéreo para ellos (físico para mí) era reconfortante.
Desde luego, reconozco ese sentimiento. Yo he estado mucho tiempo sin poder hablar de ello... E incluso sin querer hablar con otras madres embarazadas. Pero el hecho de compartir con otras personas que han pasado la misma experiencia yo creo que sí que ayuda. Por lo menos en mi caso.
Un gran abrazo.
Eloisa, yo perdi un bebito a pocas semanas de embarazo. Despues de 8 años luchando contra la inferilidad al fin mi positivo habia llegado. Ese bebecito yo lo amaba desde hace mucho tiempo. Cuando lo perdi sufri mucho como si lo hubiera conocido, como si lo hubiera tocado. Las personas son muy cureles. Todavia recuerdo con dolor cuando alguien dijo que yo habia hecho mal en haber anunciado mi embarazo por que "no siempre se logran"... la gente subestimaba mi dolor por que eran pocas semanas y por eso decidi dejar de contarlo aunque yo siempre lo recuerdo con mucho amor y avces me imagino si estuviera aqui conmigo y pienso en cuantos años tuviera etc. Aveces tambien callamos por que la gente no nos comprende y minimisa nuestro dolor...
ResponderEliminarHola Anna:
EliminarSí que es cierto que vivir con toda esa incomprensión te hace refugiarte en el silencio. Pero al igual que en muchos otros ámbitos de esta "maternidad diferente", quizás haya que luchar por educar, por enseñar y mostrar el dolor real que sentimos para que nadie se sienta legitimado para minimizarlo o silenciarlo.
Entiendo tu pena y la vivo como si fuera mía. Piensa que tu bebito dejó algo en tí, algo suyo y personal. Era lo que yo decía el otro día cuando explicaba que esa parte no es solo espiritual sino incluso física, ya que el bebé puede mandar sus células a la madre desde muy prontito. Tu hijo está físicamente contigo aunque se haya marchado y eso nadie te lo podrá quitar.
Un gran abrazo,
Ojalá tuviera respuesta para al menos uno de los tantos POR QUÉ.
ResponderEliminarDe ese tema no se habla. Cuando se cuenta, la gente reacciona extraño. Imagino que la desinformación tiene mucho que ver en esto. Imagino también que si es difícil vivirlo, lo que será entenderlo para alguien a quien jamás le ha tocado pasarlo. No saben qué decir y muchas veces, dicen cualquier cosa.
"No hay nostalgia peor que añorar lo que nunca jamás sucedió..." canta Sabina. Qué cantidad de planes e ilusiones depositamos en cada embarazo, desde que el test nos da positivo...
Besos!
Ante todo,y lo primero, un fuerte abrazo y ánimo en estos momentos tan duros.
ResponderEliminarComo todos, no hay respuesta para casi ninguna de tus preguntas, pero creo que la pregunta de ... "porqué la gente se empeña en decirte que pienses en tus hijos"..., creo que la respuesta es sencilla relativamente.
Por una parte, desde el punto de vista de la madre sobre todo, pero también del padre, creo que lo que quieren decirte es que pienses que tienes ya un hijo o dos en tu caso, maravillosos, que ya has podido dar sentido a una vida en pareja. Ningún dolor es medible ni comparable, pero la pérdida de un hijo no nacido cuando es la primera gestación, a toda esa tristeza y dolor se unen las dudas y miedos a saber si lograrás una segunda, o tercera, o ..., que si llegue a buen término...
Y por otro lado creo que también significa ese manido ... "la vida sigue"..., es decir, si no tuvieras ni pareja, ni hijos, ni familia ni amigos, probablemente desearías morir y no te importaría..., pero con dos hijos esperandote, hay que sacar fuerzas de donde sea y luchar para que ellos sean lo más felices posible.
En ambos casos creo que son palabras de ánimo
Muchos besos
Primero de todo, siento muchísimo tu pérdida. Espero que estés mejor.
ResponderEliminarDescubrí tu blog hoy, día en el que me terminaron de confirmar que mi bebé definitivamente tiene un encefalocele (http://www.cdc.gov/ncbddd/spanish/birthdefects/encephalocele.html). Es mi primer bebé y las probabilidades de esta patología son de 0,8 de 10.000...
Yo tengo más porqués para añadir a esa lista: por qué yo, por qué si tengo menos de 35, por qué la gente es tan gilipollas de decir "ya tendrás otros", por qué a estas alturas no hay avances en la medicina para curar estas afecciones...
Lo peor, es que lo peor está por venir...
Tengo otra pregunta, por qué no le pasa esto a las que quieren abortar? Por qué Dios o quien sea nos hace esto a nosotras? No es justo.
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